Anuncio publicitario

Como la publicidad manipula la mente de los consumidores


Como la publicidad manipula la mente de los consumidores


La Publicidad y la Mente

Una funcionalidad inmersa en la publicidad, es que trabaja en nuestra mente por ello, al abordar el tema de publicidad es necesario primero saber cómo funciona la mente del ser humano porque es el receptor de lo que se crea. Conforme el tiempo ha avanzado han existido grandes cambios que dan resultados impresionantes en innovación, la creatividad humana es sin duda algo impresionante. 

Cabe entonces entender la funcionalidad del cerebro humano, para ello las ciencias se dan a la tarea de apoyar a la publicidad en encontrar una respuesta a este tema, realizando y agregando conceptos neurológicos o psicológicos que aportan por su forma comportamientos que el ser humano tiene y los transforma en conceptos. 

Una forma de aprender del ser humano es el sensitivo, y por ello el sistema nervioso central en toda su forma transmite al cerebro información constante de lo que vemos, lo que oímos, lo que olemos, mi sentir dependiendo el estado del día. Estas experiencias son parte fundamental para poder conocer la mente humana. Con lo que se recaba, nuestro cerebro tiene la capacidad de procesar todas esas sensaciones y transformarlas en información y con ello enviar una respuesta inmediata. Como la publicidad manipula la mente de los consumidores, como se ve por medio de Todas estas sensaciones y reacciones que son estimuladas y reproducidas por nuestro cerebro, dan como resultado que ese cumulo de información se vaya almacenando de manera inconsciente, información que no usamos a diario pero que si al percibir un estímulo estará de inmediato en la mente. Como vemos realmente el saber sobre el funcionamiento de la mente puede facilitar el impacto de la publicidad.  

Las reacciones que produce nuestro cerebro, crean emociones y alimenta como se plantea de una manera inconsciente nuestra percepción publicitaria. Entonces, las interacciones que se tienen ante la publicidad pueden determinar y controlan nuestros pensamientos e incluso influir en nuestros deseos sobre las marcas, productos y servicios. 

La función de nuestra mente entonces es vital, sin embargo, vemos que es vital para quienes están en publicidad y marketing porque es un indicio para llegar al público meta. Es una forma empírica para nuestros objetivos ya que es necesario llevar al cumplimiento de nuestra meta para ello, sabiendo como funciona nuestra mente podemos encaminar nuestros esfuerzos a crear audiencia, medir frecuencia, estimar los factores estructurales de Atención, y sobre todo usar la creatividad para hacer efectivo y aprovechar el recurso.


Audiencia

Lo más importante en relación con el primer factor de esta ecuación es no obsesionarse con las audiencias. La clave no se esconde en cuánta gente va a estar expuesta a nuestro mensaje sino en que tanto la mente es capaz de reaccionar a ese estimulo y llevar a cabo la función de recordar de interactuar con nuestra marca.

Frecuencia

Esta está representada por el número de veces que se repite una publicidad. En que nos ayuda, pues una repetición constante hace que la mente guarde información y almacene la cantidad de veces que se visualiza la misma eso hace que poco a poco el cerebro actúe sobre las decisiones de compra.

 Factores Estructurales de Atención

Estos están dados por los factores que sirven para atraer la atención de las personas: por ejemplo, un mayor espacio en una revista, mayor duración de un spot televisivo, los colores que se utilizarán, los sonidos, el spot de radio, entre otros.

Creatividad

Esta está dada por la generación de emociones que multiplican la efectividad del mensaje. Dentro de la publicidad y el marketing son elemental porque es la forma en que el mensaje persuadirá al prospecto.

Como la publicidad manipula la mente de los consumidores, como vimos influye mucho la publicidad en la mente del consumidor, un estudio constante de los deseos y pensamientos del consumidor darán mayor éxito a tu producto o marca.

Hasta la próxima.